EntradaSantuario

El Santuario de Ntra. Sra. de la Esperanza, patrona de Calasparra, está situado a seis kilómetros de esta ciudad del noroeste murciano. Es un hermoso lugar a orillas del río Segura, donde la naturaleza ha creado un bello rincón de oración.

La obra, que recuerda en su lineamiento arquitectónico la influencia de la estética de Gaudí, ha reunido naturaleza y arte en una combinación bastante armónica. A este paraje se le denomina ‘Lomas de la Virgen’.

En este hermoso paraje el río ha trazado un pequeño valle, y en una gruta natural se encuentra la ermita, de cuyo techo de piedra mana un venero de agua.

En la actualidad es visitado por multitud de personas de la Región y de fuera de ella, que atraídos por el semblante de una Virgen de talla pequeña y brazos abiertos, acoge a cuantos peregrinos se acercan a ella para hacerla partícipe de sus alegrías y problemas.

Titularidad: Diócesis de Cartagena.

Grado de protección: 1-BIC.

Estilo: Ecléctico.

Periodo: Siglo XVII.

Dirección: Lomas de la Virgen.Calasparra
FachadaSantuario

Arquitectura

Junto al lecho del río, en las Escarihuelas, un camino forestal conduce al Santuario a través del joven pinar de las «Lomas de la Virgen». Es un paraje acogedor, con jardinería que desciende en terrazas hasta la corriente.

Características y estilo

Se podría decir que se trata de un conjunto arquitectónico ecléctico, donde el elemento predominante popular se mezcla con reinterpretaciones sencillas de la arquitectura medieval, clasicista y barroca. La piedra es el elemento “uniformador” que se une a la naturaleza, siendo interesante resaltar un cierto aspecto “naif.”

La ermita de la Virgen se encuentra en un abrigo natural excavado por las aguas en un cortado rocoso, al cual se le ha colocado el cerramiento lateral que le faltaba, construido a base de mampostería con un lenguaje popular que interpreta, a su manera, diferentes arquitecturas más elaboradas.

Zonas de la ermita

El techo está formado por la propia roca, cortada según un plano que sube hacia el altar mayor. A los pies se sitúa la zona para las velas, que suelen arder en un gran número y de manera constante.

La cabecera, plana, está ocupada por un retablo rectangular apaisado, en cuya parte central se emplaza el camarín para la imagen venerada en el templo, rodeado por un gran arco, a cuyos lados se ubican sendos escudos. Este retablo, en tonos verdes y dorados principalmente, contiene la fecha de 1892 así como numerosos símbolos o motivos marianos.

Transformaciones a lo largo del tiempo

Desde el aspecto inicial que presentaba la ermita cuando se fundó en los primeros años del siglo XVII a la actualidad, se han producido notables cambios. Las mayores transformaciones se llevaron a cabo entre los años 1888 y 1892 según Armand.

 

InteriorSantuario

Historia y personajes

Orígenes

Los primeros datos escritos del Santuario de la Virgen de la Esperanza datan del siglo XVII, si bien existen fundamentos para pensar que la Virgen es venerada desde mucho antes.

Leyenda

Cuenta la leyenda que un pastor que guardaba su ganado en estas cuevas, excavadas por las aguas del río, encontró la imagen  “La Pequeñica”, seguramente olvidada por algún caballero cristiano. El pastor comunicó de su valioso hallazgo a las autoridades eclesiásticas y civiles de Calasparra, que con los habitantes del pueblo vinieron alborozadas y quisieron llevarse la imagen para ser venerada en el pueblo.

Dice la leyenda que la Virgen se hizo tan pesada para su tamaño, que todos comprendieron que era aquí, en la cueva, donde deseaba ser venerada, y decidieron, por tanto, acondicionarla.

Virgen de la Esperanza

El porqué y cuándo se colocó junto a la Virgen de la Esperanza (La Grande), la “Pequeñica” (La Aparecida), no se sabe con exactitud, pero sí se conoce que en el año 1786 ya se veneraban juntas, y que en 1840,  fue nombrada la primera patrona de Calasparra.

Personajes

A principios del siglo XVII Dña. Juana Sánchez, viuda adinerada de Mula, donó la imagen de Nuestra Señora de la Esperanza, la Virgen grande, concretamente en el año 1617. Esta imagen es la que actualmente se venera en la ermita y que, junto con la de «La Pequeñica», atrae al Santuario a multitud de personas.

Obras

Como bienes muebles incluidos dentro del conjunto, destacamos los siguientes:

Retablo principal: es un retablo rectangular apaisado, en cuya parte central se emplaza el camarín para la imagen venerada en el templo, rodeado por un gran arco, a cuyos lados se ubican sendos escudos. Este retablo, en tonos verdes y dorados predominantemente, contiene la fecha de 1892, así como numerosos símbolos o motivos marianos.

Imagen de Ntra. Sra. la Virgen de la Esperanza (La Grande): se trata de una imagen de vestir. La cabeza es el único elemento original, siendo añadidos con posterioridad el cuerpo y los brazos. Esta talla se encuentra encuadrada dentro de las tipologías de los siglos XVI y XVII. Ojos grandes, orejas pequeñas y ligeramente subidas, y nariz larga en proporción a la estrechez de la boca.

Imagen de la «La Pequeñica»: no se ha hallado hasta el momento referencia escrita acerca de su procedencia y la fecha de su ejecución, pero sí sabemos que Dña. Juana Sánchez dona la imagen Grande en 1617 para presentar las dos juntas, con lo cual en esta fecha ya existía la escultura. La imagen tiene las manos de diferente forma y dimensión una con respecto a la otra, denunciando este aspecto las intervenciones sufridas.

Corona de la Virgen de la Esperanza: realizada por Fernando Marmolejo, orfebre sevillano. La corona tiene un peso de un kilo y medio de oro y piedras semipreciosas. El arco está rematado con doce estrellas que representan las doce tribus de Israel, están sujetas con muelles de oro para que al paso de la Virgen en Romería se muevan.