M. J. GIL El embajador de China en España, Zhu Bangzao, que ayer participó en Murcia en una jornada dedicada a este país asiático, animó a las empresas españolas y murcianas a conquistar a los 98 millones de compatriotas suyos que viajan al extranjero y que este año pueden llegar a alcanzar los 100 millones. El diplomático destacó que España posee «una cultura antigua, paisajes maravillosos y gastronomía», por lo que aconseja «explorar las posibilidades de atraer a los turistas chinos». Lamentó que no se hayan concretado las condiciones para que los inversores extranjeros que adquieren propiedades inmobiliarias en España consigan la tarjeta de residencia. Sin embargo, recordó que el Corredor Mediterráneo es la puerta de entrada a la denominada «Ruta de la Seda del siglo XXI». También apuntó que España puede servir de puente para el comercio de Asia con América y África.

Zhu Bangzao, que intervino en la jornada ‘China y la internacionalización de las ciudades’, organizada por el ayuntamiento de Murcia e International City, analizó las reformas económicas que ha programado su país para los próximos años, centradas en la mejora de las condiciones de la vida urbana, el avance hacia «la ciudad inteligente», la creación de empleo y la rebaja de las emisiones contaminantes. El propósito es conseguir «un desarrollo más armonioso entre la industria y el medio ambiente». También es necesario acoplar a cien millones de personas que viven en chabolas.

Los objetivos trazados por el Estado chino obligarán a rebajar el crecimiento que el país ha mantenido en los últimos años para situarlo en torno al 7% y a aplicar reformas que, a su juico, suponen que «se ha acabado la carne y sólo quedan huesos difíciles de masticar». En total, la programación establecida contempla la aplicación de 55 líneas de actuación con «más de 300 reformas sin precedentes». Añadió que el Gobierno también tiene pendiente la creación de «nuevos modelos de Administración».

Considera que su país ofrece grandes posibilidades para la exportación de productos españoles. También cree que España reúne los atractivos necesarios para captar a los turistas chinos, que esta año pueden llegar a realizar hasta 100 millones de viajes al exterior.

Destacó que uno de los objetivos es el despegue del consumo interno, frente al esfuerzo por las exportaciones, lo que ofrece una oportunidad a los inversores que estén dispuestos a competir en el mercado chino. El país aspira también a modernizar su agricultura para conseguir una producción mecanizada e informatizada, lo que abre la puerta también a las empresas de la Región especializadas en el desarrollo de la tecnología del riego.

Admitió que las inversiones de las compañías chinas en España están por debajo de las que reciben otros países de Europa, lo que atribuye a que «el 95% son pequeñas, por lo que se requieren intermediarios para conocer los entresijos». También apuntó que «España debe dar más garantías», en respuesta a un intermediario que representa a 200 empresas chinas interesadas en invertir aquí.

Por su parte, el alcalde de Murcia, Miguel Ángel Cámara, destacó que la Región cuenta con la infraestructuras logísticas que la convierten en «un excelente puerto de entrada a Europa e Iberoamérica».